miércoles, 21 de septiembre de 2011

La vida misma.

Ten claro que nunca más volveré a pronunciar tu nombre, que nunca más soñare con verte, que nunca mas ansiare tenerte entre mis brazos.
Los palos son algo que vienen con la vida. Son algo a lo que tienes que acostumbrarte porque no todo es un camino de rosas. Puede que estos los conozca de cerca, pero cada uno de ellos me viene de improvisto. Aunque bueno, ¿la vida se basa en la improvisación no? En lo negativo siempre hay algo positivo solo necesitas verlo. 
Ni las lamentaciones ni las lagrimas harán borrón y cuenta nueva con tus errores. A lo hecho pecho. Cada uno comete sus errores por los cuales se arrepiente. Y la verdad, no creo que fueras un error pero sinceramente me arrepiento, no de haberte conocido ni tampoco de haberte besado, de haberme arrastrado tanto como lo he hecho. Me arrepiento de haberme dejado utilizar de haberme hecho un muñeco, un arlequín con el que te pudieras reír. 
Sin duda eres un paso más de mi vida, eres alguien con quien aprendí.

- Tengo claro que ya no volveré a pensar en él, con lo de hoy ya no puedo, lo de hoy me ha hecho ver que pasa de mi. Simplemente voy a pasar ya de él.
-Eso lo tendrías que haber hecho hace mucho tiempo. 

Los errores, los cometidos, los hechos, la vida misma te hace darte cuenta de que hay cosas en las que te equivocas. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario